China apoya el proyecto de la junta militar birmana para organizar nuevas elecciones y permitir una “transición democrática” en este país del sudeste asiático, declaró el viernes el ministro chino de Relaciones Exteriores, Wang Yi.

“Respaldamos a Birmania para que alcance una reconciliación política interna en el marco de su Constitución y relance el proceso de transición democrática a través de elecciones”, declaró en un encuentro regional en Chiang Mai, Tailandia.

Wang se reunió por primera vez esta semana con Min Aung Hlaing, el jefe de la junta que se hizo con el poder en 2021 y destituyó el gobierno elegido democráticamente de Aung San Suu Kyi, ganadora del Nobel de la Paz y detenida desde el golpe.

En el encuentro, abordaron “la estabilidad en las regiones fronterizas”, según un comunicado de la junta.

El estado Shan, en el norte de Birmania, registra enfrentamientos permanentes desde que una alianza de grupos étnicos rebeldes reanudó una ofensiva contra el ejército birmano en un eje comercial estratégico que lleva a China.

Los militares birmanos han postergado en numerosas ocasiones las elecciones. En julio prolongaron seis meses el estado de emergencia, aplazando en la práctica una vez más la posibilidad de organizar comicios.

El Gobierno chino es el principal aliado y proveedor de armas de la junta militar, si bien los expertos consideran que Pekín también mantiene lazos con grupos étnicos birmanos, especialmente aquellos que se encuentran cerca de su frontera.

El 6 de agosto, el Ejército anunció su salida de varias zonas fronterizas con el supuesto objetivo de «priorizar y salvaguardar la seguridad de la población», una decisión tomada después de que el Ejército de la Alianza Democrática Nacional de Birmania (MNDAA, por sus siglas en inglés) haya cosechado avances en la lucha contra el Ejército.