Un convoy de camiones militares y vehículos blindados ha sido desplegado el viernes hacia la frontera norte de Brasil, en respuesta a la tensión generada por el reclamo de Venezuela a Guyana por la región del Esequibo. Ante esta situación, el ejército brasileño ha decidido reforzar su presencia en la zona para garantizar la seguridad y protección de sus fronteras.

Más de dos docenas de vehículos blindados han llegado a Manaos por transporte fluvial, y algunos de ellos han partido por carretera hacia Boa Vista, capital del estado de Roraima. Con este incremento en la guarnición local, se espera contar con un total de 600 soldados para resguardar la frontera, según informó el ejército en un comunicado.

Entre los refuerzos de vehículos blindados se encuentran seis Cascavel, vehículos brasileños de seis ruedas equipados con un cañón de 37 milímetros; ocho guaraníes, vehículos de transporte de personal 6×6; y 14 Guaicuru, vehículos blindados ligeros multitarea con tracción en las cuatro ruedas. Los vehículos más pesados fueron transportados en camiones con remolque de plataforma.

Hasta el momento, el ejército no ha especificado si estos vehículos permanecerán en Boa Vista o si serán enviados a Pacaraima, una localidad ubicada en la frontera con Venezuela. El conflicto fronterizo implica una región de aproximadamente 160.000 kilómetros cuadrados, que es más del doble del tamaño de Irlanda y está mayormente cubierta por una espesa selva.

Con esta medida, Brasil busca fortalecer su presencia militar y enviar un mensaje claro a Venezuela y Guyana sobre su compromiso con la seguridad en la zona y su respaldo a los intereses de Guyana en el conflicto por el Esequibo.