El Departamento del Tesoro de Estados Unidos ha anunciado la imposición de nuevas sanciones contra dos empresas navieras ubicadas en Hong Kong y Emiratos Árabes Unidos.

Esta medida tiene como objetivo desmantelar la red financiera que respalda a los rebeldes hutíes en Yemen, respaldados por Irán.

Según el comunicado del Departamento del Tesoro, estas empresas se dedicaban a enviar productos básicos iraníes en nombre de una red de facilitadores financieros hutíes.

Se sostiene que «los ingresos de las ventas de materias primas apoyan a los hutíes y sus continuos ataques contra el transporte marítimo internacional en el mar Rojo y el golfo de Adén».

Las sanciones buscan cortar el flujo financiero que alimenta las actividades de los rebeldes en Yemen y, específicamente, su participación en ataques contra el transporte marítimo en la región.

Este movimiento refleja los esfuerzos de Estados Unidos por contrarrestar el respaldo extranjero a los hutíes y abordar las preocupaciones sobre la seguridad en las rutas marítimas críticas.

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