El reciente vertido de toneladas de gránulos plásticos en las costas europeas, especialmente en Galicia, ha sido calificado como una auténtica catástrofe ambiental por legisladores del Parlamento Europeo.

La eurodiputada alemana Ska Keller, del bloque de los Verdes, señaló que lo ocurrido en Galicia es solo la punta del iceberg, y la contaminación con más de mil millones de pellets plásticos representa un desastre para el medio ambiente, la fauna marina y las comunidades locales.

A pesar de que el desastre en Galicia no alcanza ni siquiera el 1% de los pellets de plástico que se pierden anualmente, la eurodiputada irlandesa Grace O’Sullivan considera que es equiparable a un derrame de petróleo con otro nombre, describiéndolo como un crimen.

Las aproximadamente 26 toneladas de estos pequeños gránulos, utilizados en la industria para fabricar envases y contenedores de plástico, llegaron a las costas gallegas tras ser vertidos al mar por un buque de bandera liberiana.

En el debate en el Parlamento Europeo, la discusión se tornó en una disputa sobre la responsabilidad, enfrentando a los aliados del gobierno nacional español con los partidarios de las autoridades locales gallegas.

Mientras algunos enfatizan la urgencia de abordar la crisis ambiental, otros destacan la necesidad de una legislación europea más ambiciosa para poner fin a la impunidad de las empresas responsables de estos desastres.

El comisario europeo para Ambiente, Océanos y Pesca, Virginijus Sinkevicius, reconoce la falta de soluciones fáciles ante la contaminación con pellets de plástico, pero destaca la necesidad de acciones audaces y decisivas para proteger los océanos, ya que estos gránulos plásticos pueden ingresar a la cadena alimentaria humana al ser ingeridos por animales marinos.

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