En breve… La abogada Sidney Powell, quien formaba parte del equipo legal de la campaña del expresidente de los Estados Unidos, Donald Trump, admitió su responsabilidad en el caso de Georgia relacionado con la tentativa de influir en el resultado de las elecciones presidenciales de 2020 en dicho estado.

A detalle: 

• Powell, que enfrentaba cargos junto con Trump y otras 17 personas por violar las leyes estatales contra el crimen organizado, presentó su culpabilidad un día antes de que comenzara la selección del jurado.
• Reconoció su responsabilidad en seis delitos menores relacionados con la interferencia deliberada en el proceso electoral. Como consecuencia, recibió una sentencia de seis años de prisión en suspenso, lo que significa que estará bajo libertad condicional supervisada por un oficial. A
• demás, se le impuso una multa de 6 mil dólares y se le ordenó emitir una disculpa por escrito al estado de Georgia y sus ciudadanos.
• Finalmente, Powell también accedió a proporcionar testimonio veraz contra los demás acusados en juicios futuros.

En contexto:

• Powell, de 68 años, enfrentaba cargos por crimen organizado y su participación en un plan destinado a mantener al entonces presidente republicano en el cargo tras su derrota en las elecciones de 2020 frente al demócrata Joe Biden. Los fiscales también alegaron que estuvo involucrada en el acceso no autorizado a los sistemas de votación en la oficina electoral de un condado rural en Georgia.
• Se trata de la segunda persona acusada en el caso de Georgia en admitir su culpabilidad. El primer caso fue el de Scott Hall, quien a finales de septiembre reconoció su responsabilidad en cinco delitos menores como parte de un acuerdo previamente negociado con la Fiscalía.
• En virtud de este acuerdo, se redujeron las acusaciones contra Hall y se estipuló que cumplirá una condena de cinco años en libertad condicional. Además, deberá pagar una multa de 5,000 dólares y llevar a cabo 200 horas de servicio comunitario.

¿Qué podemos esperar?

• La decisión de Powell de aceptar un acuerdo de culpabilidad marca un cambio drástico en la postura de esta abogada, quien, quizás más que cualquier otra persona, promovió teorías conspirativas infundadas sobre un fraude electoral, a pesar de la existencia de pruebas concluyentes en sentido contrario.
• Si los fiscales la obligan a testificar, podría proporcionar detalles sobre los acontecimientos de una conferencia de prensa que co-protagonizó en nombre de Trump poco después de las elecciones y de una reunión en la Casa Blanca a mediados de diciembre de ese año, donde se discutieron estrategias y teorías destinadas a influir en el resultado de las elecciones.

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