Suiza.-La situación es cada vez más alarmante para los hospitales en Suiza, pues ante los innumerables casos de COVID-19 están colapsando. La demanda de pacientes es cada vez más alta y la falta de camas y de apoyo empieza a escasear.

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El médico jefe de la unidad de cuidados intensivos del hospital «La Chaux de Fonds» Hervé Zende, manifestó su preocupación, pues han tenido que tomar medidas muy drásticas con algunos pacientes, es decir, de los pacientes que han ingresado y que se encuentran en recuperación, pero que no quiere decir que estén a salvo, a ellos se les hace una evaluación  y se determina quién tiene más posibilidades de avance para después darlos de alta e ingresar a más pacientes que llegan  graves.

Las cosas se están poniendo cada vez más difíciles al grado de llegar ha estas medidas, que para muchos puede ser como «moneda de cambio». Pero no quiere decir que sea culpa del personal médico que se tomen estas decisiones, pues conforme se agrava y se sigue expandiendo el virus de COVId-19, el hospital se va quedando sin camas y no cuenta  con material extra.

Jérémy Bouhelier, jefe de enfermería de la unidad de cuidados intensivos del hospital «La Chaux de Fonds» afirma que el cansancio se esta haciendo presente en el personal: «Todo el mundo está cansado, mental y físicamente agotado, se necesita energía… Todo el mundo está estresado, pero por otro lado todos estamos orgullosos del trabajo que hacemos».