Jesse Harding Pomeroy, también conocido como «el chico torturador» o «el demonio», mató a una niña de 10 años y a un niño de cuatro años, cuando él solo tenía 14 años. Se estima que mató a por lo menos 10 niños más.

Su vida

«El chico torturador» nació el 29 de noviembre de 1859, su padre era alcohólico, y con frecuencia desnudaba y golpeaba a su hijos. Lo anterior habría provocado que Pomeroy iniciara a sentir placer con el dolor.

El también apodado «demonio», era muy solitario y en la escuela sufría bullying. Mientras que desde niño se perfilo como asesino, ya que mató a los canarios de su madre y torturó al gato de su vecino. Por lo que su familia no volvió a tener mascotas.

Te puede interesar:

• FUERTES IMÁGENES: Las fotos reales que tomó Jeffrey Dahmer a sus víctimas

Primeras agresiones

Entre 1871 y 1872, cuando Jesse Pomeroy tenía entre 12 y 13 años, varios niños denunciaron que eran llevados bajo engaños a zonas alejadas, donde eran golpeados por un chico más grande que ellos.

Los niños eran golpeados, amarrados, torturados y como su padre lo hacía con él, «el chico torturador» también los desnudaba para atracarlos. Además, en ocasiones se masturbaba frente a ellos. Luego de que varios casos salieran a la luz, las autoridades iniciaron a ofrecer una recompensa para dar con el agresor.

Por su parte, la madre del chico sospechaba que su hijo era el responsable de tales ataques, por lo que se mudó con toda su familia al sur de Boston. Pero en el lugar los ataques continuaron.

Robert Gould, de cinco años fue una de sus víctimas, quien logró dar más detalles físicos del agresor, por lo que las autoridades lo buscaron en su escuela, pero no estaba. Sin embargo, ese día pasó cerca de la comisaría donde otra de sus víctimas deba su declaración, y lo identificó.

Fue de esta manera que en septiembre de 1872, fue detenido y aunque la idea era que estuviera en prisión hasta los 18 años, su madre logró que en 1874, a los 14 años, saliera de prisión con libertad condicional.

También te puede interesar: 

• “El Mata novias”, el asesino que guardaba el cabello de sus víctimas

Katie Curran

La madre del chico tenía una tienda, por lo que le dio empleo para que estuviera ocupado, sin embargo, Katie Curran, de 10 años, acudió al sitio el 18 de marzo de 1874 por un cuaderno de notas, Jesse Pomeroy  dijo que quedaba uno en el sótano y que había que ir  a buscarlo, lo que la niña aceptó.

En el lugar, la degolló con su navaja de bolsillo y después se limpió la sangre para posteriormente volver a la tienda como si nada hubiera pasado. Cuando el cuerpo de la víctima fue localizado ya estaba en un avanzado estado de descomposición, por lo que no se pudo determinar exactamente lo que recibió antes y después de su muerte.

Horace Millen

El segundo asesinato que cometió fue el de un niño de cuatro años, identificado como Horace Millen, a quien llevó a una a una zona pantanosa, supuestamente para mostrarle un barco, pero en el lugar lo mató con un cuchillo.

Sin embargo, en ese caso, diversos testigos habían visto al asesino con el niño. Por lo que cuando su cuerpo fue encontrado, todas las sospechas recayeron en él. Debido a ello, acudieron a su casa a detenerlo a pesar de que su madre se negaba.

También te puede interesar:

• Un mexicano fue víctima de Jeffrey Dahmer, el asesino que mató a 17 hombres.

El cuerpo de Katie Curran  se localizó mucho tiempo después cuando la madre del chico vendió la tienda. Debido a ello, los trabajadores del nuevo dueño entraron al sótano y encontraron los restos de la pequeña.

Condena

«El chico torturador» se declaró culpable de ambos delitos, por lo que el fiscal general de Massachusetts, lo culpó de asesinato de primer grado. La condena para ello era la horca, pero ningún gobernador se atrevió a firmar la sentencia debido a que se trataba de un adolescente.

Posteriormente, el gobernador Alexander Rice le impuso la prisión perpetua a Jesse Harding Pomeroy, quien se convirtió en la persona más joven condenada por el delito de homicidio en primer grado en la historia del estado de Massachusetts.

Mientras estuvo en prisión, «el chico torturador» estudió Derecho y durante décadas estuvo componiendo desafíos legales con el objetivo de disminuir su condena. Además, en diversas ocasiones intentó escapar.

Finalmente, fue trasladado a un hospital de la policía para criminales dementes, debido a su mal estado de salud. En el lugar murió a los 72 años, en septiembre de 1932.

También te puede interesar: 

• Kermit Gosnell, el asesino serial de más de 100 recién nacidos
• Amelia Dyer, la cuidadora que asesinó a 400 bebés