Los Ángeles, Estados Unidos.- Una madre de Los Ángeles admitió haber ahogado a sus tres hijos pequeños – «suavemente» y «disculpándose todo el tiempo» – para mantenerlos alejados de su padre presuntamente abusivo.

Liliana Carrillo, la «única sospechosa» de los horribles asesinatos, según la policía de Los Ángeles, confesó en una entrevista en la cárcel haber matado a Joanna Denton Carrillo, de 3 años, a Terry de 2, y a Sierra, de 6 meses, en medio de una encarnizada batalla por la custodia con su ex marido, Erik Denton, informó KGET-TV.

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En una conversación de casi 30 minutos en las instalaciones previas al juicio de Lerdo en el condado de Kern, Carrillo admitió rotundamente haber matado a los tres hijos de la pareja, que fueron encontrados muertos en un apartamento de Los Ángeles el sábado, para «protegerlos» de abusos.

“Los ahogué”, dijo la madre sobre sus hijos al reportero Eytan Wallace. «Lo hice tan suavemente … no sé cómo explicarlo, pero, um, los abracé y los besé y me disculpé todo el tiempo. Amo a mis hijos.»

Una emocionada Carrillo, de 30 años, dijo que no quería que los niños pequeños de la pareja fueran «más abusados», alegando que Denton estaba involucrado en la trata de personas. Ella también lo había acusado de participar en una red de pedófilos y permitir que alguien abusara de una de sus hijas, según Denton y los registros judiciales citados por Los Angeles Times.

“Amaba a mis hijos”, continuó un emocionado Carrillo. «Como dije, desearía que este no tuviera que ser el caso, pero no iba a permitir … prometí protegerlos».