Nicaragua cumplirá su proceso de abandono de la Organización de Estados Americanos (OEA) el 19 de noviembre de 2023, dos años después de haber formalizado su decisión de denunciar la carta de la organización.

A pesar de este paso, la dictadura de Daniel Ortega sigue sujeta a ciertas implicaciones y obligaciones.

La presidencia del Consejo Permanente de la OEA, actualmente bajo la dirección del embajador de Antigua y Barbuda, Ronald Sanders, ha solicitado un informe sobre las consecuencias de esta medida.

Este informe cita una opinión consultiva de la Corte Interamericana de Derechos Humanos emitida en 2020 a raíz de una consulta de Colombia.

Esta opinión destaca la importancia de que los Estados miembros de la OEA, como garantes colectivos de su eficacia, puedan expresar observaciones u objeciones a la denuncia de un estado.

Hasta el momento, ningún Estado miembro ha presentado observaciones u objeciones a la denuncia de Nicaragua.

Nicaragua abandona la OEA

Por lo tanto, Nicaragua dejará de ser miembro de la OEA a partir del 19 de noviembre de 2023.

A pesar de su salida de la OEA, Nicaragua sigue obligada a cumplir con las obligaciones de derechos humanos derivadas de la Carta de la OEA y las decisiones de los órganos de protección de derechos humanos del sistema interamericano hasta su total cumplimiento.

La denuncia efectiva de la Carta de la OEA no surte efectos retroactivos, lo que significa que Nicaragua no puede desligarse de las obligaciones contraídas durante su membresía.

El deber de cumplir con los tratados interamericanos de derechos humanos ratificados y no denunciados sigue siendo vigente, lo que implica que Nicaragua sigue sujeta a convenciones como la Convención Americana sobre Derechos Humanos y la Convención Interamericana para Prevenir y Sancionar la Tortura, que no ha denunciado formalmente.

Además, Nicaragua sigue obligada a cumplir con las normas consuetudinarias, las derivadas de principios generales de derecho y las pertenecientes al ius cogens, que continúan obligando al Estado en virtud del derecho internacional general.

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