El Gobierno de Punjab, estado fronterizo con Pakistán, tomó medidas drásticas para proteger la salud de sus ciudadanos, al prohibir la fabricación de cinco tipos de jarabes para la tos. Esta decisión se da después de que la Organización Mundial de la Salud (OMS) emitiera una alerta advirtiendo sobre la presencia de altos niveles de toxicidad en estos medicamentos.

La alerta de la OMS surge tras una serie de incidentes de medicación contaminada, que han causado la muerte de más de 300 niños en Indonesia debido a fallos renales agudos. Además, también se han reportado numerosas muertes en países como Gambia y Uzbekistán.

El Gobierno de Punjab prohibió la venta de estos jarabes para la tos fabricados por Pharmix Laboratories, con sede en Lahore, los medicamentos estaban destinados tanto para el mercado local como para su exportación a otros países de la región.

El vocero del gobierno provincial, Sohail Janjua, señaló que tomarán medidas estrictas contra aquellos que perjudiquen la reputación del país debido a estos incidentes. La adopción de esta prohibición tiene como objetivo principal salvaguardar la salud y el bienestar de la población en general.

La Autoridad Reguladora de Medicamentos de Pakistán (DRAP) identificó la presencia de dietilenglicol y etilenglicol en estos jarabes. Estas son sustancias químicas utilizadas comúnmente como disolventes industriales y anticongelantes, y su consumo puede resultar altamente tóxico para los riñones y el hígado.

La decisión del Gobierno de Punjab ha sido aplaudida por expertos en salud y la comunidad internacional, ya que demuestra el compromiso de Pakistán en garantizar la seguridad y la calidad de los medicamentos que se consumen en el país.

Se espera que las autoridades continúen investigando y tomando medidas para prevenir futuros casos de medicación contaminada. La seguridad y el bienestar de los ciudadanos deben ser siempre la máxima prioridad.