El papa Francisco tiene programada una visita a la cárcel de mujeres de Rebibbia en Roma el próximo 28 de marzo, donde celebrará la misa del Jueves Santo y llevará a cabo el tradicional lavado de pies a las reclusas. Esta práctica es una tradición que el papa ha mantenido desde su tiempo como arzobispo de Buenos Aires y refleja su compromiso con los más necesitados y marginados de la sociedad.
La agenda del papa para la Semana Santa incluye diversos ritos y celebraciones, desde la misa del Domingo de Ramos hasta la bendición Urbi et Orbi el 31 de marzo. A pesar de haber enfrentado algunos problemas de salud recientemente, el papa está decidido a presidir todos estos eventos y compartir la fe con los fieles.
El Vaticano ha confirmado la participación del papa en las diversas ceremonias de la Semana Santa, incluyendo la Misa Crismal el Jueves Santo y la celebración de la Pasión del Señor el Viernes Santo, seguida del tradicional vía crucis en el Coliseo de Roma.
Este compromiso refleja el profundo compromiso espiritual del papa Francisco y su deseo de acompañar a los creyentes durante estos importantes momentos litúrgicos.