El expresidente estadounidense, Donald Trump, estaría llevando a cabo un plan para restablecer políticas migratorias controvertidas, como ‘Quédate en México’, grandes redadas, campos de detención y deportaciones masivas de migrantes, según informes del medio The New York Times.

De acuerdo con el Times, los asesores de Trump proporcionaron la descripción más amplia y detallada hasta ahora sobre la agenda de inmigración del expresidente en caso de un posible segundo mandato.

La campaña de Trump remitió las preguntas sobre el tema a Stephen Miller, uno de los arquitectos de las políticas migratorias de su primer mandato y quien aún mantiene una estrecha relación con él y se espera que ocupe un cargo importante en una posible segunda administración.

Acciones que Trump planea implementar contra migrantes

Entre las acciones que Trump tiene planeadas se encuentra el uso de la diplomacia coercitiva para involucrar a otras naciones en la resolución de la crisis migratoria. Miller afirma que una segunda administración Trump buscaría restablecer el acuerdo con México para que los solicitantes de asilo permanezcan en ese país mientras se procesan sus solicitudes, aunque no está claro si México estaría de acuerdo, ya que un tribunal mexicano declaró que el acuerdo viola los derechos humanos.

Además, Trump presionaría para revivir los acuerdos de ‘terceros países seguros’ con varias naciones de América Central y buscaría expandirlos a África, Asia y América del Sur. Asimismo, el expresidente republicano buscaría retomar la prohibición de la entrada de personas de ciertas naciones de mayoría musulmana y la reimposición de una política de rechazo de solicitudes de asilo en el contexto de la pandemia de Covid-19.

Trump contempla un despiadado plan de expulsión de migrantes

Según el informe del Times, Trump tiene la intención de llevar a cabo redadas en todo el país en busca de inmigrantes indocumentados y deportar a millones de personas cada año. Además, estaría preparando una amplia expansión de un método de expulsión que no requiere audiencias de debido proceso.

Para apoyar a la agencia de Inmigración y Control de Aduanas (ICE, por sus siglas en inglés) en estas redadas masivas, tiene planeado reasignar a otros agentes federales y designar oficiales de policía locales y soldados de la Guardia Nacional proporcionados voluntariamente por los estados gobernados por los republicanos.

Con estas posibles acciones, Trump busca reforzar su postura migratoria y controlar el flujo migratorio hacia Estados Unidos. Sin embargo, estas políticas son objeto de críticas por parte de grupos defensores de los derechos humanos y organizaciones internacionales, quienes argumentan que violan los derechos fundamentales de los migrantes.

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