El sahumerio es un incienso de plantas aromáticas, que se ha usado desde la antigüedad como parte de rituales para hacer limpiezas energéticas. 

Te decimos cómo hacer un sahumerio de romero para purificar los espacios de tu casa.

Su definición, la de “sahumar”, significa “perfumar una cosa con humo aromático”. En este caso, como usaremos romero, ya te puedes imaginar la fragancia con la que quedará impregnado tu hogar.

El romero es una hierba perenne aromática que se utiliza para fines culinarios, para hacer perfumes y por todos sus beneficios a la salud. Esta planta se usaba tradicionalmente para aliviar los dolores musculares, mejorar la memoria, fortalecer al sistema inmune y para mejorar la circulación. Además se sabe de sus beneficios para malestares estomacales y prevenir los deterioros cognitivos por la proteína beta amiloide.

Cuando se sahuma con romero se genera un ambiente vibracional positivo y estimulante que neutraliza las malas energías de la mano de sus propiedades aromáticas.

Hacer tu propio sahumerio en casa es muy sencillo, solo necesitas:

• 1 manojo de ramas de romero.
• 1 pabilo.
• 1 rama de canela.
• 1 rodaja de naranja.
• Una pizca de canela en polvo y azúcar.

Corta las ramas de romero con el permiso y la bendición de la planta. Recuerda que quieres que tu proceso para limpiar tus espacios estén libres de cualquier tipo de violencia o karma. Que sean los suficientes para que los sostengas con la mano izquierda.

Amarra las ramas en espiral con el pabilo, seguidamente, incorpora la rama de canela y de naranja a pequeño bouquet. Espolvorea la pizca de canela en polvo y azúcar sobre el sahumerio de romero.

Guíndalo y déjalo secar durante dos semanas.

Una vez este se haya deshidratado estará listo para quemarse y limpiar tu casa.

Los momentos para hacer las limpiezas dependen de cada persona, pero normalmente estas difuminaciones de energía se hacen antes de ir a la cama, después de un largo día rodeado de gente, antes y después de haber tenido invitados en tu casa, cuando te mudas a una nueva casa, cuando comienzas un nuevo trabajo y cuando inicias tu propio negocio.

O también antes y después de una sesión de sanación, antes de la meditación, después de cualquier enfermedad y después de una discusión/conflicto.

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