El cambio climático representa una amenaza para los Juegos de Invierno. Según se detalla cada vez hay menos lugares susceptibles de acoger esta cita.

Por su parte, los expertos han destacado las afectaciones que la nieve artificial genera al medio ambiente. Así mismo, se indica que podrían ser necesarios hasta 2 millones de metros cúbicos de agua para crear la superficie de nieve artificial en las pistas olímpicas de Pekín.

«Es triste que se necesite tanta nieve artificial para los deportes de invierno. Aunque la rampa o halfpipe siempre se suele hacer con nieve artificial, de todos modos se necesitan bajas temperaturas y estas llegan cada vez más tarde», explicó Taylor Gold del equipo de snowboard de Estados Unidos.

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Por su parte, el Comité Organizador de Pekín prometió unos juegos sostenibles y respetuosos para el medio ambiente. Sin embargo, han surgido diversas dudas respecto a ello.

Zhangjiakou, es sede de las competiciones de esquí alpino. Pero es una de las zonas más secas de China, apenas y llueve. Por lo que la nieve debe transportarse desde kilómetros de distancia.

«Muchas de estas antiguas sedes se están calentando muy rápidamente, lo que tiene enormes consecuencias no solo para los Juegos Olímpicos, también para la economía local y el clima», explicó Tessa Gorte, investigadora de la Universidad de Colorado-Boulder.

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