Una mujer le donó un riñón  a su exesposo después de cinco años de estar divorciados, para que sus hijas no se quedaran sin padre.

Se trata de Kelly Hope una mujer inglesa que decidió ser la donante que su exesposo esperaba desde hacía 12 meses.

Kelly decidió tomar el riesgo a pesar de que su ex Dan Pyatt le dijo que no podía pedirle algo así.

«Aunque ya no estemos juntos, no estoy preparada para que mis hijas se queden sin padre”, fue lo que le contestó.

Después de someterse a los exámenes de compatibilidad que resultaron positivos, la cirugía resultó bien y ambos se encuentran estables.

En el hospital jamás habían tenido una situación similar, nunca una expareja donó un riñón, pero Kelly dio una gran explicación al respecto.

Puede que no estemos casados ​​ahora, pero todavía somos una gran familia y tuve que hacer ese sacrificio para mantener a nuestra familia unida», dijo en entrevista al medio Mirror UK.

Kelly y Dan eran amigos desde la infancia. Se conocieron a los 11 años, empezaron a salir a los 18 y se casaron 13 años después, pero antes de cumplir un año de casados Dan fue diagnosticado con una enfermedad renal.