Prométete a ti mismo
Sé tan fuerte que nada pueda turbar la paz de tu pensamiento.
Habla de felicidad y prosperidad a cada persona que encuentres.
Mira siempre el lado positivo de las cosas.
Piensa solamente lo mejor, trabaja por lo mejor, y espera lo mejor. Alégrate del triunfo de los otros, como si fuera el tuyo propio.
Olvida los errores cometidos en el pasado, y piensa solamente en las promesas del futuro…
Ten en todo momento buen semblante y ofrece siempre una sonrisa.
Trata de mejorar en cada momento, para que no te quede tiempo de criticar, y tú llegues a lo máximo que puedas ser.
Haz que todos tus amigos sientan que hay algo bueno en ellos.
Prométete a ti mismo, ser:
Demasiado generoso para afligirte…
Demasiado noble para enojarte…
Demasiado fuerte para sentir miedo…
Demasiado feliz para permitir la entrada a las preocupaciones…
Luego, cumple estas promesas, y tu vida será distinta.