Las hemorroides son venas situadas en el ano que se inflaman y ocasionan un gran dolor. Estas almorranas, como se conocen popularmente, pueden ser de distintos tipos según la intensidad con la que se desarrollen. Las más graves necesitan medicamentos, mientras que las más leves pueden solucionarse con el paso del tiempo y un tratamiento apropiado desde casa.
Se han popularizado decenas de remedios caseros para las hemorroides que, en mayor o menor medida, sirven para aliviar las molestias. Estos son algunos de los más utilizados.
El hielo
Aplicar hielo en la zona puede paliar la hinchazón que se produce en el ano a causa de la presencia de hemorroides. El frío ayuda a reducir la cantidad de sangre que se acumula en el área, de forma que las almorranas se desinflaman y se convierten en retráctiles, es decir, se pueden volver a introducir en el ano.
No se debe aplicar el hielo directamente sobre la piel, ya que este podría producir quemaduras. Hay que envolverlo en una toalla o en un paño bien limpios sobre la zona del ano durante unos minutos.
El vinagre de manzana
Otro remedio casero tradicional bastante habitual para aplacar la aparición de hemorroides es el vinagre de manzana. Este producto ayuda porque tiene propiedades antiinflamatorias y analgésicas.
Esta solución se debe aplicar de forma externa. Por un lado, se puede mojar un poco de vinagre de manzana en una gasa o algodón y dar pequeños toques en la zona dolorida para que se desinflame.
La manzanilla
La manzanilla es uno de los remedios caseros más utilizados ya que sus propiedades son muy beneficiosas para acabar con distintos problemas del organismo. En lo que se refiere a las hemorroides, la manzanilla consigue desinflamar las venas hinchadas en el ano, que son las que producen el dolor y el picor.
Las propiedades del ajo
Es bien sabido que el ajo es antiinflamatorio, por lo que también viene bien para las almorranas. Para aplicarlo en la zona a tratar, se suele recomendar hervir un par de dientes de ajo machados en agua que, una vez fría, se debe colar y aplicar con un algodón empapado en la zona del ano. Por otro lado, utilizar hojas de acelga directamente en la zona o tomar habitualmente zumo de tomate también pueden ser remedios que complementen los tratamientos habituales de esta anomalía.