El sexo anal sigue siendo un tabú, no muchas parejas hetero se animan a intentarlo por prejuicios y miedos por sus riesgos, que si tiene sus peligros, como cualquier otra actividad sexual.

Es mejor ver el sexo anal como una forma de experimentar y realmente placentero. Solo si se cumple con precauciones que te harán quitarle el miedo.

El peligro del sexo anal, en su mayoría, es la falta de lubricación y estimulación. Recuerda que es una zona estrecha que necesita su juego previo manual.

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Entonces manos a la obra con estas precauciones:

Para prevenir infecciones, evita tener penetración vaginal o sexo oral luego de que tu pareja ha retirado el pene de tu ano. En el ano se encuentran bacterias que son peligrosas si entran en la vagina y en la boca. Lo mejor es usar un condón o lavarse bien.

Usa un lubricante. Hay fricciones que pueden ocasionar rasgaduras dentro de la cavidad del ano y romper las delicadas membranas. No uses nunca los que están hechos a base de aceite.

Es un factor de riesgo para contraer ITS. Por eso, si decides tener sexo anal, hazlo SIEMPRE con un condón de látex para reducir las posibilidades.