Por: Ilse Gaytán

En el sexo, hay múltiples acciones que en el momento podrían parecer buena idea, pero soplar no es una de ellas y aquí te contamos por qué.

Si nunca has usado una menta o pastilla fresca para el sexo oral, pues es momento para ir a la tienda y practicarlo, ya que su frescura suele ser reconfortante, pero hay un límite.

En este sentido, soplar al hombre, durante el sexo, puede ser muy satisfactorio, porque su órgano sexual se encuentra al exterior y cada roce es estimulante.

Sin embargo, en el caso de la mujer, soltar aire dentro de ella trae consigo consecuencias nada gratas: primeramente, puede ocasionar resequedad y la lubricación es esencial para el coito.

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Además, un estudio del Departamento de Psicología de la Universidad de Nueva York demostró que soltar aire en la vagina puede ocasionar una burbuja o émbolo gaseoso.

Las burbujas o émbolos gaseosos pueden transportarse por el torrente sanguíneo y bloquear los vasos por los que llega la sangre a los órganos vitales, aumentando el riesgo de una embolia.

Por lo tanto, solo usa la menta para refrescar la boca y con el juego de lengua transmitir frescura, pero no lo sueltes con aire.