De las posturas más sencillas y cómodas del sexo, el misionero, pero que dirías si te mencionamos que todo este tiempo algo has estado haciendo mal, porque, aunque sea muy fácil tiene su truco.
Si bien la postura solo radica en una persona boca arriba y la otra encima suya para lograr la penetración (vaginal o anal), hay mucho más que se pueden hacer.
Si te has concentrado en que el misionero solo es colocarse arriba y moverse entonces si has hecho mal, toda posición es sexual tiene variantes e ideas que te harán disfrutar aún más.
También te podría interesar: Las variaciones del “perrito”
Versión asiento de loto. Recuéstate de espaldas en la cama con las piernas dobladas, te recomendamos que te pongas una almohada detrás para mayor comodidad, mientras él se arrodilla delante de ti.
Versión la casa. Eleva la cadera y engancha tus piernas a su cintura, para mantener el equilibrio haz fuerza con tus brazos, él se arrodillará entre tus piernas. Para mayor placer hacer movimientos circulares con las caderas en ambas direcciones.
Versión caja de seguridad. Esta posición se parece mucho al misionero original. También estarás recostada sobre tu espalda y él estará encima, pero se colocará totalmente tumbado y haciendo fuerza con sus brazos. Mientras tú enganchas tus piernas a su cintura, lo que facilita la penetración, y realizáis movimientos al mismo ritmo.
Ahora si el misionero será tu posición favorita porque no tendrá nada de aburrida.