Un estudiante de secundaria fue vinculado a proceso tras ser señalado como responsable del delito de violación a la intimidad sexual, luego de que presuntamente alterara una fotografía de su compañera y la difundiera por WhatsApp.
El hecho ocurrió el pasado 25 de octubre en la colonia Residencial El Tapatío, en San Pedro Tlaquepaque. De acuerdo con la Fiscalía del Estado, la víctima recibió una imagen editada que combinaba su rostro con el cuerpo de una mujer desnuda, enviada por un compañero de clases. Tras la denuncia presentada por los padres de la menor, las investigaciones permitieron judicializar el caso y presentar al adolescente ante un juez, quien dictó medidas cautelares como la prohibición de acercarse o comunicarse con la víctima y testigos durante un periodo de cuatro meses.
La Fiscalía subrayó la importancia de educar a niños y adolescentes sobre el respeto y el uso responsable de la tecnología, señalando que estas acciones constituyen delitos que son sancionados por la ley.
Este caso se suma al de Diego “N”, un estudiante del Instituto Politécnico Nacional (IPN) acusado de utilizar inteligencia artificial para manipular miles de imágenes con fines sexuales. Aunque recientemente fue absuelto por falta de pruebas en dos de las ocho denuncias en su contra, su caso ha puesto de manifiesto la urgencia de establecer precedentes legales sobre violencia digital y el uso indebido de tecnologías. A pesar de la resolución, su proceso legal continúa, incluyendo cargos por trata de personas y la apelación de las víctimas para buscar justicia en un contexto que sigue revictimizando a quienes alzan la voz.
Ambos casos evidencian la necesidad de reflexionar como sociedad sobre los riesgos de la violencia digital, la responsabilidad en el uso de plataformas tecnológicas y la construcción de sistemas judiciales que verdaderamente protejan a las víctimas.