En una resolución histórica para la política local, el Instituto Electoral y de Participación Ciudadana de Jalisco (IEPC) formalizó la pérdida de registro de los partidos Hagamos y Futuro, tras no alcanzar el 3% de los votos necesarios en las elecciones del pasado 2 de junio. La decisión, tomada por unanimidad, representa un momento significativo para la democracia en el estado.
Durante la sesión, Paula Ramírez, consejera presidenta del IEPC, enfatizó que la desaparición de un partido político refleja la voluntad popular expresada en las urnas. “La subsistencia de una fuerza política está en manos de la ciudadanía. Este acuerdo no es otra cosa que la materialización de esa voluntad”, expresó.
Con esta resolución, ambos partidos pierden los beneficios establecidos por la ley electoral, como el acceso al financiamiento público y a los tiempos oficiales en radio y televisión. Además, deberán liquidar sus activos y cumplir con las obligaciones marcadas por la legislación electoral para el cierre de actividades.
La desaparición de Hagamos y Futuro deja un vacío en el espectro político local, donde estos partidos se habían posicionado como opciones emergentes con agendas centradas en el desarrollo social, los derechos humanos y la representación de sectores juveniles. Su salida genera interrogantes sobre cómo se redistribuirá el apoyo ciudadano y qué fuerzas ocuparán su lugar en los próximos comicios.
La decisión del IEPC pone de relieve la importancia de la participación ciudadana en el fortalecimiento de las instituciones democráticas. Para muchos, este hecho subraya la necesidad de replantear estrategias políticas que conecten con las demandas de la ciudadanía, especialmente en un entorno donde el respaldo popular define la supervivencia de los partidos.
La política de Jalisco está en un momento de redefinición, y será crucial observar cómo esta transformación impactará en la representación y el ejercicio democrático en los años por venir