La Secretaría de Salud de Nuevo León ha alertado sobre la presencia de casos de rabia en el estado, destacando los últimos registros que datan de 1986 y 1998, uno transmitido por perros y otro por fauna silvestre respectivamente.
En respuesta a esta situación, se ha anunciado un refuerzo en la campaña de vacunación antirrábica, con un llamado a la responsabilidad de los propietarios de mascotas.
La titular de la Secretaría de Salud, Alma Rosa Marroquín, informó durante una conferencia de prensa sobre la preocupante disminución en la aplicación de la vacuna antirrábica en animales domésticos en el estado.
Además, señaló que en lo que va del año se han identificado tres murciélagos con el virus de la rabia, contrastando con el único caso registrado en el año anterior.
Ante esta situación, se recomienda a la población evitar el contacto con la fauna silvestre durante excursiones al campo, especialmente con los murciélagos, para minimizar los riesgos.
Asimismo, se ha iniciado una jornada de vacunación, con una estrategia de barridos casa por casa, con el objetivo de detectar posibles animales contagiados y proteger la salud tanto de las mascotas como de la ciudadanía.