La crisis forense en México se ha convertido en un problema de proporciones históricas, con el incremento de la desaparición forzada de personas y de los homicidios dolosos y culposos alcanzando niveles récord en las últimas tres décadas.
De acuerdo con datos del Inegi, en el año 2023 se recibieron en los servicios periciales de todo el país un total de 94,983 cadáveres, con una mayoría de hombres (77,382) y mujeres (16,221), además de casos en los que no se pudo determinar el sexo de la persona fallecida. Además de estos cadáveres, también se recibieron cerca de 12,000 «piezas» de restos humanos, así como óbitos fetales y otros componentes humanos.
Cadáveres almacenados
La problemática se ve reflejada en la falta de infraestructura y personal capacitado para atender este aumento en la demanda de servicios periciales. Al cierre del año 2023, se tenían almacenados más de 15,000 cadáveres y cerca de 13,000 restos humanos en diversos centros forenses del país, con solamente 32 coordinaciones estatales de la FGR y 413 unidades de servicios periciales para dar respuesta a esta crisis.
Los estados con mayor infraestructura forense suelen coincidir con aquellos que reportan un mayor número de homicidios intencionales y desapariciones, destacando a Jalisco, Michoacán y Guanajuato como entidades con mayor cantidad de unidades estatales.
La demanda de servicios periciales ha ido en aumento en los últimos años, con millones de solicitudes de intervención que no logran ser concluidas. En 2023, se registraron más de 5 millones de solicitudes de intervención admitidas, con 227,593 casos sin concluir, marcando un nuevo récord en la historia del país.
Es importante destacar que de los cadáveres recibidos en los servicios forenses en 2023, la mayor parte se reportaron completos y con conservación de tejidos blandos, aunque también se registraron casos de restos en estado de descomposición, esqueletizados, con exposición al fuego, y una cantidad considerable de cuerpos «no identificados».
En cuanto a las especialidades de los peritos que laboran en los servicios forenses del país, las más numerosas son criminalística, medicina forense, psicología forense y valuación de bienes y servicios.
Ante esta situación alarmante, es crucial que las autoridades en México tomen medidas urgentes para fortalecer y modernizar los servicios periciales y forenses, con el fin de garantizar la justicia y la identificación de las personas fallecidas, así como la prevención de futuros crímenes en el país.