El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador (AMLO), ha denunciado al Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (Issste) como uno de los casos más extremos de corrupción en el sector salud. El mandatario ha revelado impactantes detalles sobre la institución durante su conferencia matutina en Palacio Nacional, en la Ciudad de México, el 16 de enero de 2024.

El control del Issste, un botín político

AMLO ha afirmado que el Issste sigue enfrentando enormes dificultades a pesar de los 17 meses de intensa reestructuración, debido a la resistencia interna que han encontrado. El presidente recordó que Elba Esther Gordillo apoyó la campaña de Felipe Calderón, el expresidente, y le entregó el control del Issste como muestra de gratitud. Miguel Ángel Yunes asumió el control del Issste posteriormente, pero se distanció de Gordillo más tarde.

Una institución completamente corrompida

La secretaría de Seguridad Pública, Rosa Icela Rodríguez, encargada del proceso de reestructuración del Issste, ha revelado que se encontraron con una institución completamente corrompida. Ha señalado que se han detectado conflictos de intereses, fraude y la participación de exfuncionarios públicos convertidos en propietarios de empresas que brindaban servicios al Issste. Además, ha informado que se han descubierto graves casos de fraude por un monto superior a los 15 mil millones de pesos.

El Issste, un cascarón privatizado

Rodríguez ha destacado que el Issste se ha reducido a un mero cascarón, ya que la gran mayoría de sus servicios eran privados y no del gobierno federal como se creía. Ha explicado que desde la elaboración de un caldo de pollo hasta la provisión de ambulancias, todo se encontraba privatizado. La funcionaria ha indicado que, aunque existen procedimientos donde se contrata a un integrador, el personal sigue siendo del Issste, buscando así mejorar la calidad de los servicios.

El objetivo del gobierno es superar el nivel de satisfacción actual de los pacientes, el cual se encuentra en un 86%. Sin embargo, la realidad es que en muchos casos la medicación recetada no se encuentra disponible en un 75% o incluso 50% de las ocasiones, generando una gran insatisfacción entre los pacientes.

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