Ismael Zambada García, también conocido como «El Mayo«, fue detenido en un pequeño aeropuerto en las afueras de El Paso, Texas, tras entregarse junto con Joaquín Guzmán López, hijo de «El Chapo» Guzmán.
Según fuentes cercanas a la investigación, Guzmán López persuadió a Zambada García para que lo acompañara en un vuelo en el que supuestamente iban a ver propiedades, pero que en realidad los llevó directamente a las manos de las autoridades estadounidenses.
«El Mayo» había mantenido comunicación con autoridades estadounidenses durante al menos tres años, para negociar su entrega. Sin embargo, el jueves, no sabía que se dirigía a Estados Unidos cuando abordó el avión privado con Guzmán López.
Zambada García, de 76 años, ha sido descrito como uno de los criminales más poderosos de México, siendo uno de los fundadores del cártel junto a «El Chapo» hace décadas. Por otro lado, Guzmán López, quien fue elevado a un puesto de liderazgo en el cártel junto con sus hermanos tras la extradición de su padre a Estados Unidos en 2017, también ha sido clave en las operaciones del grupo criminal.
Detención de “El Mayo” Zambada y Joaquín Guzmán López
Estos arrestos han sido considerados una gran victoria por parte de las autoridades estadounidenses, que han estado tras los pasos de los hijos de «El Chapo» Guzmán, conocidos como los «Chapitos«, por su presunta participación en el tráfico de fentanilo, una de las drogas más letales del mundo.
El fiscal general Merrick Garland celebró los arrestos como un paso importante en la lucha contra el narcotráfico, afirmando que el Departamento de Justicia no descansará hasta que todos los responsables de envenenar comunidades rindan cuentas.
Ambos hombres enfrentarán ahora un proceso legal en Estados Unidos, con Zambada García siendo detenido sin derecho a fianza y fijada una audiencia para fines de julio. Por su parte, Guzmán López comparecerá ante un tribunal federal en Chicago en los próximos días.
Se espera que estos arrestos tengan un impacto en el mundo del narcotráfico, aunque expertos como Falko Ernst señalan que el Cártel de Sinaloa es una organización descentralizada y resistente a este tipo de golpes. Sin embargo, se teme que la violencia pueda incrementarse debido a luchas internas por el control del grupo.
También te puede interesar: