La Fiscalía General de Justicia del Estado de México dio a conocer que concluyó el peritaje sobre la muerte del empresario Iñigo Arenas Saiz y se determinó que fue asesinado.
Mediante un comunicado se detalló que la causa de muerte «fue asfixia mecánica por sofocación inducida en su modalidad de oclusión de las vías respiratorias por contenido gástrico con presencia de alcohol y de sustancias química de naturaleza controlada, que limitaron su conciencia, funciones motoras y que en grado de probabilidad habría propiciado su deceso”.
Los dependencia también informó que cuatro mujeres y dos hombre fueron detenidos por la muerte del empresario Iñigo Arenas Saiz en el bar Black Royce en Naucalpan.
De acuerdo con la Fiscalía, los detenidos suministraron sustancias al empresario que fue visto por última vez en Polanco durante el fin de semana pasado.
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Se agregó que como parte de las investigaciones se realizó un cateo al bar. En donde se encontraron pastillas y sobres con lo que resultó ser cocaína. Al igual que recipientes de aplicación de gotas «cuyo contenido está siendo objeto de análisis químico».
La investigación también reveló que el empresario llegó al lugar poco después de las 3:00 horas del domingo 6 de agosto. Tras ello fue colocado en un área ubicada en la planta baja.
En el sitio estuvo acompañado por cuatro mujeres, empleadas del lugar, identificadas como Atziri ‘N’, Ana Karen ‘N’, Cecilia ‘N’ y Ana Karen ‘N’. Las mujeres fueron quienes estuvieron ordenando diversas bebidas alcohólicas y son quienes presuntamente habrían suministrado las sustancias a la víctima.