CDMX.- El crédito bancario destinado al consumo en México ha mantenido un sólido avance durante el año, con un aumento del 12.7% anual en términos reales en septiembre, según datos del Banco de México (Banxico). Esta tendencia positiva ha persistido durante 33 meses consecutivos con aumentos anuales, siendo 19 de ellos con crecimientos de dos dígitos.
James Salazar, subdirector de análisis económico de CIBanco, señaló que resulta sorprendente la resistencia del crédito al consumo, a pesar de que en meses recientes no se haya reflejado en un mayor consumo. Salazar explicó que es probable que las familias estén recurriendo a este tipo de créditos para compensar la disminución en el empleo y los salarios reales, manteniendo así un nivel de ingreso disponible para el gasto.
En cuanto al desglose de la cartera, se observaron diferentes comportamientos. El crecimiento en tarjetas de crédito se desaceleró a un 7.6% anual real en septiembre, mientras que en créditos nómina disminuyó a un 4.6% desde el 7.9% y 5.2% registrados en agosto, respectivamente. Por otro lado, el crédito para la compra de bienes duraderos experimentó un incremento del 38.7% anual real en septiembre, principalmente impulsado por el sector automotriz con un crecimiento del 44.7%.
La Asociación Mexicana de Distribuidores Automotrices (AMDA) reveló que de enero a septiembre, el crédito representó el 70% de las compras de vehículos nuevos al menudeo, demostrando la fortaleza del crédito automotriz en el país.
Economía mexicana se mantiene fuerte, señala Banxico
Además, los créditos personales también mostraron resistencia con un avance del 8.4% anual real en septiembre. En términos generales, la cartera vigente de crédito registró un crecimiento del 7.1% anual real en el mismo mes, alcanzando un total de 6.56 billones de pesos, distribuidos principalmente entre empresas, personas físicas con actividad empresarial, crédito al consumo y crédito a la vivienda.
Irasema Dagnini, analista económica, advierte que el lento crecimiento de la cartera de crédito podría señalar una desaceleración económica, especialmente en el sector empresarial, aunque el crédito a la vivienda creció un 2.8% anual real en septiembre.
Alberto Ramos de Goldman Sachs señala que las altas tasas de interés, el bajo crecimiento y la incertidumbre política podrían afectar la originación de crédito. Sin embargo, la banca mexicana mantiene sólidos fundamentos, con alta capitalización y morosidad controlada.
Analistas de Intercam mencionan que, aunque persiste la incertidumbre, las tasas de interés más bajas podrían estimular la demanda de financiamiento. En un entorno que anticipa un menor crecimiento para 2025, el crédito sigue siendo vital para el desarrollo, especialmente en el ámbito empresarial.