En una entrevista, Ana, cuyos apellidos se mantendrán en anonimato por respeto a ella y su familia; en un dia comun y corriente dio su número de teléfono celular para solicitar informes sobre un curso de Tanatología, pero eso se volvió una pesadilla, puesto que el hombre que lo obtuvo lo utilizó para acosarla, extorsionar y, finalmente, abusar sexualmente de ella. Ana narro que:

Siento que me quitó todo, ahora creo más que no debo de confiar en nadie. Me quitó todo en un día, se puede decir, porque me quitó mis ganas de vivir, mis ganas de seguir adelante, me quitó mi trabajo, me quitó mi seguridad misma. 

La mujer, con lágrimas en los ojos contó dentro del interrogatorio que desde que dio su número de celular su vida cambió radicalmente; la afectada comentó que ahora vive con miedo, no logra dormir y llora todo el tiempo, dejó en claro que la huella del abuso que vivió es imborrable.

Ana recuerda que su objetivo solo era solicitar informes para un curso de Tanatología; a pesar de ello, el hombre que recibió el número, aseguró que su hermana era quien ofrecía la capacitación y comenzó a acosarla; el victimario le mandaba mensajes y le insistía en que fuera su novia, Ana relata que:

Lo primero que me pidió fue mi numero celular, me dijo que su hermana ofrecía los cursos de tanatología, todo el tiempo me dijo que yo fuera su novia, siempre le dije que no, todo el tiempo que me insistió le dije que no, que ya tenía mi esposo. 

Continuando con el hecho, la mujer agregó que por respeto a su familia y a su esposo, le pidió que no la molestara más; pero como era de esperarse, el sujeto insistió y con apoyo de una amiga de la víctima logró conseguir la dirección de su trabajo; ahí el acosador se presentó dos veces.

Lo primero que me dijo fue que mi amiga me había traicionado, que ella le había dado toda mi información

La mujer decidió no contarle a su esposo ya que pensaba que nada le podría pasar, pero se equivocó; la segunda ocasión que la busco a su trabajo, se la llevó caminando, la privó de sus pertenencias y posteriormente abusó sexualmente; esto ocurrió en un área verde ubicada cerca del Metro Indios Verdes. Ana narro:

Me llevó caminando como unos 10 minutos, me iba diciendo que lo agarrara como si fuera mi novio, que porque sino yo me iba a morir. Traía una pistola en una bolsita-cangurera y todo el tiempo iba hablando por teléfono (…) Él me venía amenazando, me dijo que si yo intentaba hacer algo, él me iba a matar. 

El recorrido que el agresor hizo caminar a Ana, fue de la estación Talismán del Metro hasta el paradero Indios Verdes; hecho que quedó grabado en las cámaras de la CDMX. Ana recordó con rabia:

En el lapso de qué íbamos caminando me quitó mi celular, me quitó mi dinero y me llevó a unas áreas verdes que están ahí por el Metro Indios Verdes y ahí abusó de mí, me rompió toda mi ropa y yo recuerdo que estaba todo el tiempo llorando. Después Sólo me llevó como a un andén, me dejó ahí y me dijo ahorita regreso, se fue y ya nunca regresó. 

Desde ese acontecimiento, Ana se sintió tan débil y vulnerable que tuvo que cambiarse de domicilio ante la amenazas que recibió; a pesar de que ha pasado tiempo aun pasa los días sin dormir.

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Foto: La Opinión