Este sábado 23 de marzo marca el aniversario de 30 años del asesinato de Luis Donaldo Colosio, un evento que sacudió a México y cambió el curso de la historia política del país. Colosio, candidato presidencial del PRI, fue asesinado durante un tumultuoso mitin en Tijuana, Baja California, cuando apenas tenía 44 años y se perfilaba como favorito en la contienda electoral.

El homicidio de Colosio Murrieta marcó un antes y un después en la política mexicana, y aún hoy sus repercusiones se hacen sentir. Sin embargo, a 30 años del trágico suceso, la atención se centra en su hijo, Luis Donaldo Colosio Riojas, quien ha decidido seguir los pasos de su padre en la política y actualmente se postula como candidato al Senado por Movimiento Ciudadano en las próximas elecciones del 2 de junio.

El joven político, tras dejar la alcaldía de Monterrey, ha expresado su deseo de servir a México y defender valores como la tolerancia y la transparencia en la política nacional. Colosio Riojas busca consolidar su carrera política con esta candidatura al Senado, considerada como un escalón hacia una proyección nacional.

Pero el legado de Colosio también se ve marcado por la figura de Mario Aburto, el asesino confeso que actualmente cumple una condena de 45 años de cárcel por el magnicidio. Sin embargo, recientes acciones legales han puesto en duda esta sentencia, ya que la defensa de Aburto argumenta que la pena por homicidio en Baja California, donde ocurrió el crimen, es de 30 años.

Esta situación ha desencadenado una polémica en la que se plantea la posibilidad de que Aburto quede en libertad, lo que ha generado opiniones encontradas en la sociedad mexicana. Por un lado, Colosio Riojas ha solicitado el indulto presidencial para Aburto, buscando cerrar un capítulo oscuro en la historia del país y permitir que la sanación nacional pueda comenzar.

Sin embargo, el presidente Andrés Manuel López Obrador ha rechazado esta petición, argumentando la necesidad de iniciar un proceso de reconciliación y sanación como nación. La presión política y social en torno a este caso ha aumentado, especialmente con la reapertura de la carpeta judicial, que sugiere la posible existencia de un segundo tirador en el asesinato de Colosio.

Esta teoría, respaldada por testimonios como el del periodista J. Jesús Lemus, ha generado un interés renovado en el caso y plantea la posibilidad de que la verdad sobre el asesinato de Colosio finalmente salga a la luz. Mientras se espera el desenlace de esta compleja situación, México se prepara para conmemorar el triste aniversario de un suceso que marcó a toda una generación.