Durante la Sesión del Pleno del Congreso del Estado de San Luis Potosí, un grupo de delincuentes logró ingresar a las oficinas de la Coordinación de Servicios Parlamentarios y llevar a cabo un robo. Mientras las autoridades se concentraban en contener posibles manifestaciones en el exterior, los ladrones vaciaron los bolsos de varios empleados y se apoderaron de tarjetas bancarias recién abastecidas con su pago quincenal.

Una de las víctimas, una empleada de la Coordinación de Finanzas que prefirió mantenerse en el anonimato por temor a represalias, compartió su experiencia. Tras guardar su bolso en un escritorio y asegurar la oficina, como de costumbre, se unió al resto de sus colegas para cumplir con sus labores. Sin embargo, al regresar por su bolso al final de la sesión, se encontró con la desagradable sorpresa de que sus pertenencias habían sido saqueadas.

La mujer explicó que solicitó el material de las cámaras de vigilancia para dar con el  los ladrones, pero le informaron que no funcionaban, «cómo es posible que gasten millones de pesos en otras cosas y no en reparar o substituir el equipo de seguridad», criticó.

La denunciante lamentó la falta de medidas de seguridad efectivas en el recinto, señalando que las cámaras de vigilancia no funcionaban correctamente y que la cerradura de las oficinas era fácilmente vulnerada. Con incredulidad, expresó su frustración por la priorización de la protección de los legisladores sobre la de los trabajadores y visitantes del Congreso.

Ante la inacción por parte de las autoridades internas, la afectada anunció que presentará una denuncia formal ante la Fiscalía General del Estado. Sospecha que el robo pudo ser perpetrado por alguien dentro del Congreso, dada la información privilegiada sobre la falta de seguridad en el lugar.

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