Dafne, residente de Uruapan, Michoacán, vive una situación desgarradora al perder a su hijo de 9 meses, R.I., cuando su padre, David, lo sacó violentamente de la casa de su abuela sin presentar documentos legales.

Esta acción fue ejecutada en compañía de Raúl, quien portaba un arma, exacerbando la tensión de la situación.

Durante el incidente, la abuela de Dafne fue gravemente herida por David y Raúl, quienes lograron escapar con el bebé.

A pesar de la gravedad de los hechos, Dafne ha enfrentado desafíos en el sistema judicial. A pesar de presentar denuncias por diversos delitos, incluyendo violencia familiar y sustracción de menor, David, quien presume tener influencias dentro de la institución de justicia, ha evitado consecuencias significativas.

Incluso se ha sugerido a Dafne que busque un acuerdo con él, a pesar de la evidente violencia y las pruebas que ha presentado, como videos, fotografías y conversaciones.

El pequeño R.I. ha sido llevado a Tancítaro, una comunidad que ha establecido su propia ley debido a la presencia del crimen organizado en la región.

Respetando las costumbres y administración del lugar, Dafne solicita la ayuda del comité local para interceder con David y asegurar la pronta devolución de su hijo.

Dafne sostiene que los celos de David fueron el motivo detrás de estos actos violentos y teme constantemente por la seguridad de ella, su familia y su pequeño hijo.

Ante la gravedad y urgencia de la situación, Dafne hace un llamado angustiado a las autoridades competentes, así como a la comunidad de Tancítaro y al público en general, solicitando solidaridad y apoyo para lograr reunirse con su hijo de apenas 9 meses de edad.

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