Desabasto de medicamentos, real o multifactorial
Por: Alexis Lares López
El desabasto empieza cuando las compras públicas federales se le delegan a la Oficialía mayor de la SHCP en un intento de reducir costos, sin embargo, eso ya ocurría con las compras consolidadas realizadas por el IMSS; si bien esta institución compraba las necesidades de medicamentos de otras Instituciones como el ISSSTE, Sedena, Semar, Seguro Popular, ahora Insabi. Debido a la mega compra que se realizaba en 2013-2018 se ahorraron 21 mil 361 millones de pesos, según datos publicados en el portal del IMSS (anexo 1).
Debido a la inexperiencia, la primer compra del actual Gobierno, se realizó desfasada en tiempo, por lo mismo el 62 por ciento de las claves de medicamentos quedaron desiertas, la mayoría de los contratos se dieron mediante adjudicaciones directas. Esto origino problemas de desabasto a la mala ejecución de la centralización de compras, otro factor importante es el veto hacia tres grandes jugadores en la industria farmacéutica mexicana; este veto no contemplo una alternativa de reemplazar la red de distribución, logística, etcétera; tampoco que estas distribuidoras compraban a fabricantes los insumos necesarios, por lo que el Gobierno adquiría y pagaba por el insumo médico, pero también la distribución en cada uno de sus hospitales. En un intento por trasparentar el proceso de compras se le pide a la UNOPS (Oficina de la Naciones Unidas) que se encargará de esta tarea, pero debido a la inexperiencia de esta, en el mercado mexicano se volvió a realizar de forma tardía, si bien esta compra la realizaba el IMSS de forma gratuita, la UNOPS cobraría alrededor de 85 millones de dólares por la comisión que se le paga al organismo, sin embargo, no contemplaba la solución del problema de logística. Una propuesta fue la paraestatal Birmex, sin embargo, tiene problemas de infraestructura y personal necesario a corto y largo plazo.
La falta de acceso a insumos para la salud perjudica la tranquilidad e impacta económicamente a las familias mexicanas; cabe señalar que es especialmente problemático para aquellas enfermedades crónico-degenerativas. Si bien ya mencionamos la decisión gubernamental de frenar las compras consolidadas y a su vez delegarlas a la UNOPS, a retardado el proceso licitatorio así como los tiempos establecidos para que un fabricante pueda planear, organizar y ejecutar la producción, cuatro meses para producir un producto, desde la importación de las materias primas, hasta los permisos a los cuales se somete un producto terminado en México, sumado el problema que sufrió el mundo ocasionada por la Pandemia de la COVID-19 al retenerse importación de materias primas para la fabricación de medicamentos fue uno de los pilares que también provocaron escases, entonces hablamos de múltiples factores lo que ha ocasionado el desabasto de medicamentos.
La solución es complicada, si hay un problema en la compra consolidada que bien hacia el IMSS, que se corrija y mejore; si había corrupción que se investigue y sancione; si hay monopolios que se fomente la competencia en el sector, el querer cambiar el modelo de la noche a la mañana sin tener planes; al final estamos quizá de acuerdo con muchos puntos de vista del actual Gobierno, pero ninguna lucha se puede hacerse a costa de la salud de los mexicanos.
Escrito por: Maestro en Finanzas Alexis Lares López, Ceo de Lodifarma S.A. de C.V., e investigador en temas relacionados con salud; actualmente estudiante del Programa ADE, del Instituto de Alta Dirección de Empresas de la Universidad Panamericana (IPADE)
Anexo 1. (www.imss.gob.mx/sites/all/statics/ahorros-PMR-CC-2013-2018-PMR.pdf)