Emprendedora
Por: Emmanuel Salazar
La candidata Paty Jiménez es una empresaria del ramo mueblero que ha logrado, desde antes de entrar a la política, despuntar con éxito en la transformación de la madera y el año pasado accedió a uno de los créditos que otorgó el Gobierno del Estado para intentar evitar cierre de empresas ante la parálisis provocada por el COVID-19.
Cuando se hizo público que entre los beneficiarios de los créditos otorgados por el Gobierno del Estado se encontraba la exdiputada, Jiménez confirmó el hecho no sin antes argumentar haber accedido para poder mantener a flote el negocio que sufrió la parálisis al no estar entre las actividades esenciales y por tanto no pudo seguir con su producción.
Aún más, el mercado se estancó y aunque se pudiera trabajar no se podía desplazar la producción porque la gente dejo de comprar y eso impacto en las finanzas de las micro empresas como la que tiene Jiménez.
A diferencia de otras empresas beneficiadas, en el caso de la exlíder empresarial el número de personas ocupadas permiten establecer un cálculo de que el crédito permitió por cuatro meses mantener a flote a los trabajadores que tiene la fábrica.
Desde un principio se pudo observar que el crédito por 400 mil pesos no sirvió para, como ocurrió en otros casos, financiar la nómina de más de un año y hasta contar con cierta liquidez.
Ese crédito para algunas pequeñas empresas duranguenses fue aire puro ante la parálisis que generó la emergencia sanitaria del COVID-19, y ante la negativa del presidente Andrés Manuel López Obrador de financiar a este tipo de empresas, por lo que cada quien busco resolver la falta de liquidez.
Legisladores ligados a Morena hicieron el señalamiento de que algunos funcionarios fueron beneficiados con dichos créditos del Gobierno del Estado, lo cual resulta censurable moralmente porque legalmente no había un ilícito, informó en su oportunidad la Secretaría de la Contraloría.
Dice un famoso refrán mexicano que para tener la lengua larga hay que tener cola corta. El rasgado de vestiduras de quienes señalaron presuntas anomalías queda fuera de lugar cuando, al investigar se puede detectar que quienes hicieron señalamientos también fueron beneficiados aún y cuando sus nombres no aparecieron directamente.
Ese tema debería de ser abordado como lo que fue, un crédito que en algunos casos fue bien empleado y salvo empleos, aunque en otros sirvió para financiar la operación de algunos negocios que difícilmente generaban suficientes empleos para recibir montos elevados de apoyo.
Twitter: @jemmanuelsr