Por: Martin Alberto Hernández González

Queridos lectores, el tema que hoy tocaremos, es el cinismo municipal, por parte de las autoridades del municipio de Durango y explicaremos el porqué.

En estas semanas, las autoridades municipales, de manera indebida impusieron medidas, las cuales no tienen facultades de hacer, como el que viajen más de dos personas en un auto, las multas de negocios que no son esenciales, el remitir a personas por hacer reuniones y que hagan servicios comunitarios, entre otros.

Si bien, estas medidas se justifican en cuanto al nivel de la pandemia, no dejan de ser desde el punto de vista jurídico, restrictivas de derechos humanos y garantías individuales, facultades que no le competen a esta autoridad municipal.

Dicho lo anterior, únicamente en el ámbito legal, es necesario entrar a lo que podemos decir que es cinismo municipal, pues mientras ellos multan a negocios en el centro no esenciales, por no cerrar los mismos, según lo dijo, pareciera con gran orgullo, el juez Cívico, Mario Pozo Riestra y dicho sea de paso, si el municipio no puede quitar esos derechos, menos puede imponer multas abogado.

Ahora bien, la parte con la cual se critica al Municipio, es que mientras este tiene trabajando al personal de parquímetros como si fuera una actividad esencial, lo cual, a todas luces no lo es, sí multa a locatarios y pequeños negocios por no cerrar y no ser esenciales, como si el quitar placas por no poner saldo en parquímetro, si lo fuera.

Por otro lado, esto no es lo único, pues por ejemplo personal de Aguas del Municipio de Durango (AMD) sigue trabajando en lugares de cobros de los mismos, si bien el agua es necesaria, no lo es que estén abiertos los lugares de cobros de la misma, sin mencionar que en ese rubro, a los morosos se les siguen cobrando recargos y multas, lo cual en esta pandemia tampoco deberían de pagar.

En cuanto al servicio del agua, los costos no sólo no bajaron, sino que también el servicio empeoró, por ejemplo, desde el fraccionamiento Roma, hasta por el Palacio Federal, se tienen problemas en las casas de más de un piso, por la falta de presión del agua en la noche, lo cual hace que quienes tienen cisterna la usen, incrementando su gasto en luz y quienes no, padezcan de la falta del vital líquido en sus tinacos.

En cuanto a los filtros sanitarios que se encuentran en las entradas a la capital, por ejemplo, el de la carretera Durango-Parral, realmente no funciona, en cuanto al de la carretera de Durango-Gómez Palacio, sólo se pregunta si viene de algún lugar fuera de la capital, si responde que sí, se le toma su temperatura y solo algunos datos generales, como edad, nombre etcétera.

Esto se destaca, pues al menos ocho de cada 10, de los enfermos por COVID-19 no presentan síntomas y si solo buscan temperatura, están indagando únicamente un síntoma, sin hacer un cuestionario más completo, como si tuvieran indicios de gripa, tos seca etcétera. Por tanto, es muy incompleto lo realizado en el municipio con más contagios en todo el estado.

Por otra parte, los agentes de tránsito siguen infraccionando, por cuestiones como no traer placas, las cuales son quitadas por el mismo Municipio, entre otros, lo anterior hace parecer que el Ayuntamiento es o está en un modo recaudador y que ni en tiempos de pandemia, se solidariza por completo con su pueblo, pero si busca recaudar y siguen activas las medidas para tal efecto, como son tránsito, parquímetros e inspectores, en la parte de generar todos multas.