- Mathias Goeritz fue precursor de un nuevo modelo de escultura urbana llamada “abstracta”, hecho que dejó atrás la actual corriente nacionalista de aquella época.
Mathias Goeritz, artista incansable, nació un día como hoy 4 de abril, este año se conmemora el 105 aniversario de su natalicio. Fue arquitecto de origen alemán, considerado un artista prolífico y una de las figuras vanguardistas del arte del siglo XX en México al incursionar en la pintura, la gráfica y la escueltura.
Goeritz practicó la síntesis entre arte y arquitectura traducida en el diseño de obras como las Torres de Satélite en Naucalpan, Estado de México, uno de sus diseños arquitectónicos más emblemáticos que le dio reconocimiento internacional.
El también poeta y pintor es autor de la escultura La serpiente, la cual se encuentra en el Jardín Escultórico del Museo de Arte Moderno del Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura de la Ciudad de México, mientras que el mural Estudio de texturas, permanece en la Sala Huichol del Museo Nacional de Antropología, obra que realizó en colaboración de Pedro Ramírez Vázquez.
Aunque el también escultor y pintor Goeritz (1915-1990) -originario de la ciudad de Danzig, Alemania- estudió medicina en la Universidad de Berlín durante un año, su interés estaba en la estética, por lo que se matriculó en la Escuela de Artes y Oficios de Berlín Charlottenburg, donde estudió filosofía e historia del arte, disciplina en la que obtuvo un doctorado.
Sus inicios en el mundo del arte fueron como pintor independiente y promotor cultural de artistas experimentales que deseaban nuevos lenguajes estéticos en 1944. Después de vivir en Alemania, Marruecos y España llegó a México en 1949 tras la Segunda Guerra Mundial para vivir en Guadalajara y tres años después se mudó a la Ciudad de México.
Una vez instalado en la capital del país, en 1952, comienza una serie de proyectos que forman parte del de la Ciudad de México, como el Museo Experimental el Eco, enfocado al arte contemporáneo interdisciplinario, una de sus obras considerada piedra angular en la historia del arte moderno mexicano.
Otra obra que realizó en colaboración con el arquitecto Luis Barragán y el pintor Jesús Reyes Ferreira fue el de las Torres de Satélite en 1957. Barragán le encargó que diseñara la entrada a Ciudad Satélite, para lo cual hizo cinco pilones de hormigón de sección triangular de 36 y 58 metros de altura, uno de sus proyectos arquitectónicos más sobresalientes, aunque también diseñó y construyó las Torres de Temixco en el estado de Morelos y los vitrales de la Capilla de San Lorenzo Mártir en la Ciudad de México.
Goeritz viajó a Francia, Suiza, Checoslovaquia, el norte de África, Polonia, Austria e Italia, entre otros países. En 1942 se casó con la escritora Marianne Gast, y durante su estancia en España trabajó con artistas de vanguardia, entre ellos el pintor Joan Miró y el escultor Ángel Ferrant.
En 1959 comienza la serie de obras bidimensionales Mensajes dorados que consiste en cuadros no pintados, sino revestidos con hojas de oro, en colaboración con Luis Barragán como parte del proyecto del altar de la Capilla de las Capuchinas en la Ciudad de México.
En colaboración con los artistas Helen Escobedo, Manuel Felguérez, Hersúa, Sebastián y Federico Silva, realizó el Centro del Espacio Escultórico en Ciudad Universitaria entre 1978 y 1980. Las torres en la Facultad de Estudios Superiores Aragón de la UNAM, en 1982, y en 1988 construyó la torre de la Fundación Miguel Alemán en la Ciudad de México.
El laberinto de Jerusalén, considerada la obra más ambiciosa de arte público de Mathias Goeritz en Israel, se inició en 1973 y fue creada a partir de dibujos y maquetas. Los planos para la construcción fueron realizados en colaboración con los arquitectos Arthur Spector y Michael Amizar. Goeritz falleció el 4 de agosto de 1990 en la Ciudad de México.
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