Santiago Papasquiaro, Durango.- Una fuerte y marcada contaminación, se sufre actualmente en los dos afluentes principales, en la zona noroeste de nuestra entidad federativa, en los ríos Santiago y Tepehuanes.
Ambas corrientes de agua, nacen en la Sierra Madre Occidental y llegan a la conocida zona de Los Valles, donde ambos ríos se juntan en la región de Atotonilco, para luego, formar el famoso Río Ramos.
Una vez conformado dicho río, arrastra sus aguas, hasta la presa General Lázaro Cárdenas del Río, mejor conocida como presa El Palmito, donde cabe mencionar, se percibe una gran contaminación y de ahí, por el río Nazas, para dar vida a personas y sembradíos de la Región Lagunera.
Un sin número de basureros ilegales, descargas de drenaje y desperdicios de talleres e incluso deshechos tóxicos que no tienen un tratamiento adecuado, están contaminando todo ese paso de agua, hasta llegar a las zonas de uso humano.
Por: Jesús Martínez