Tepehuanes, Durango.- Según la información de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), se espera la llegada de entre 9 y 11 tormentas invernales, de las cuales al menos cinco podrían afectar directamente al estado de Durango, especialmente a los municipios de la región noroeste ubicados en la zona Sierra.
A pesar de los riesgos que conllevan, estas tormentas invernales podrían traer beneficios como nieve, aguanieve y niveles significativos de humedad para el bosque duranguense, que ha sufrido graves afectaciones durante la prolongada sequía en el 2023. Jorge Amaya, director de Protección Civil en el municipio de Tepehuanes, resaltó que se espera que estas tormentas tengan un impacto positivo en la reserva forestal de Durango, ya que aún presenta niveles importantes de sequía.
La Unidad de Conservación y Desarrollo Forestal Integral en Topia (UCDFI) confirmó que las esperanzas para la salud del bosque duranguense están puestas en un invierno adecuado con buenos niveles de humedad, es decir, la presencia de nieve y aguanieve durante la temporada invernal. Esto no solo contribuiría al llenado de los mantos acuíferos, sino también al fortalecimiento de la flora que ha sido afectada por las plagas.
La segunda quincena de noviembre ha comenzado con el paso adecuado para una temporada invernal favorable, con la llegada de la primera tormenta invernal que trajo nieve a la zona Sierra de Durango. Ante esto, diversas autoridades y sectores esperan que esta tendencia continúe para mitigar o reducir las afectaciones sufridas durante todo el 2023 debido a las bajas precipitaciones.
Por: Rolando Herrera