Durango, Dgo.- Recibió mortal balazo, que él mismo se disparó al interior de su recámara del propio domicilio familiar.

De quien recibió mortal balazo, se desconoce la causa por la que tomó la fatal determinación que enlutó a otro hogar.

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El que protagonizó el segundo suicidio de este domingo, el número seis en lo que va del mes de noviembre y el 164 del año, se llamaba Fidel Martínez Aldaba, contaba con 52 años de edad y tenía su domicilio en calle Morelos, de la colonia Emiliano Zapata.

La versión de los hechos

De acuerdo a la versión que se conoció en voz de familiares, los hechos ocurrieron a eso de las 16:00 horas.

Estos fueron poco después de que la señora María Esther, de 53 años, regresara de Denver, Colorado, a donde acudió para estar en el sepelio de su señora madre.

Al arribar al domicilio, al que llegó en el vehículo de uno de sus hijos, su esposo Fidel ya la esperaba y luego de saludarse, le pidió que subieran a la planta alta para mostrarle algo.

Ella lo acompañó hasta la recámara, pero al ver que tomó una escopeta, solo le pidió que no hiciera algo de lo que luego se podía arrepentir y bajó.

Un ratito después, se escuchó una fuerte detonación, por lo que la hija de ambos subió para saber lo que sucedió y encontró tirado a su padre, con sangre y el arma entre sus manos.

Luego llamaron al número de emergencias 911, llegaron los paramédicos de la Cruz Roja, trataron de reanimarlo, pero ya estaba sin vida.

Posteriormente, llegó el médico legista, perito y agente del ministerio público, quienes realizaron las diligencias correspondientes, levantaron el cuerpo y lo llevaron al anfiteatro, para practicarle la necropsia de ley.

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