Por: Mónica Rojas
“¡Mira, mira lo que encontré! – Gritaba Magdaleno, ¡válgame! – dijo la abuela admirada – ¿De quién es ese niño? No lo sé cayó del cielo”.
El pasado 27 de noviembre en el marco del Festival Internacional de Kamishibai y Narración Oral Nu Nutsi, la escritora originaria de Xalapa Veracruz, Arely León Sánchez, presentó en el museo Francisco Villa su libro “Niño Rayo”.
Arely León es mediadora de lectura y narradora oral, ha desarrollo actividades dentro y fuera del país, teniendo la oportunidad de trabajar en instituciones como: El Museo de Arte de San Juan en Puerto Rico y la Academia de Lengua Maya en Guatemala, además de ser beneficiaria de la beca de la Fundación Mustakis para perfeccionar su oficio en Santiago de Chile. Desde hace diez años coordina el proyecto «La lectura, un acto de magia» en comunidades aledañas al Parque Nacional Cofre de Perote, lugar donde surge la inspiración de este trabajo.
Este libro fue presentado por la duranguense Mónica Reveles Ramírez, poeta y escritora, directora de la Red de Escritores Independientes de Durango A.C., Reveles resaltó de León Sánchez, el lenguaje sencillo y claro, y que el trabajo de los diseñadores logró complementar el contenido de la obra. Por su parte Carlos Torres narrador oral y gestor cultural, coordinador del centro cultural en Lima Perú, citó a la narradora puertorriqueña, Tere Marichal, “cada mañana hay que empezar con un cuento” en esto refirió el valor de trabajar con conciencia y dedicación, es un trabajo valioso y necesario, además de esto comentó: “Quien lea el libro quedará enganchado, se sumergirá en el campo, en la voz de los abuelos, en la aventuras del Niño Rayo”.
Como complemento de esta presentación Vivianne Thirión, connotada narradora oral y referente latinoamericano de origen duranguense, celebró el esfuerzo de la autora e hizo una lectura “salpicada”, leyendo fragmentos específicos con el fin de generar curiosidad entre los asistentes.
Arely León reprodujo la música original de jarana que es parte de su identidad y que permea su trabajo en el cuento, escenificando de igual forma una coreografía sencilla de seguir con coplas acorde a la historia, al final agradeció a los organizadores del festival y voluntarios que participaron, a su tierra y comunidad que en ese trabajo le ha permitido abrirse caminos mágicos en varios estados y países.