• Vida útil del Pinto Saltillo concluirá y se necesita un relevo, una semilla de calidad

Han pasado más de 20 años de la creación de la variedad de frijol Pinto Saltillo y sigue cumpliendo a los campesinos, destacó el ex investigador del INIFAP, Evenor Cuellar, sin embargo, en algún momento concluirá su periodo de vida útil y es tiempo que en los laboratorios se trabaje en el diseño de una nueva semilla, también de alta calidad para ofrecerla a los productores.

“Debemos entender la importancia de producir semilla libre de enfermedades y darle tiempo a los investigadores para que traigan un relevo para el Pinto Saltillo, todas las variedades tiene un determinado periodo de vida útil, no son permanentes”, apuntó.

La variedad de frijol Pinto Saltillo se creó en el INIFAP (campo experimental Durango) durante los años 1985 a 1987 y fue liberada en Saltillo, Coahuila, en el año 2000, luego de cumplir dos validaciones, una interna y otra externa, esta última en campo -en manos de los productores- para confirmar su adaptación a diferentes condiciones de suelo y clima.

Anterior al frijol Pinto Saltillo, se tenían variedades como el Pinto Villa, Pinto Mestizo y Pinto Bayacora; todas desarrollados en Durango, en aquellos años cuando el Instituto Nacional de Investigaciones Forestales Agrícolas y Pecuarias (INIFAP) contaba con un equipo fuerte de científicos; grupo que actualmente -desafortunadamente- está muy debilitado.

Se tienen otras variedades de frijol recientes como Bravo, Coloso y Centauro; pero no han superado al Pinto Saltillo que sigue siendo fuerte, principalmente en Durango, resistente a los cambios climáticos y con cosecha de buena calidad que se vende bien en el mercado.

Evenor Cuellar señala que el frijol Pinto Saltillo ya está mostrando cierta debilidad ante la presencia de las razas, sobretodo de antracnosis y de tizón bacteriano, así que es tiempo de tener un programa estatal de producción de semilla y dar tiempo a que los investigadores trabajen en desarrollar una nueva variedad, igual o más exitosa para el campo duranguense.

La investigación agrícola es una tarea cara y desafortunadamente en los últimos años no se han destinado recursos a la investigación en el país por parte del gobierno, tampoco por empresas privadas ni del sector social; esperemos que los cambios que se realizan en los fondos y fideicomisos vengan a ofrecer una respuesta a esta situación, aunque de momento no existe claridad.

Te puede interesar: Beneficios para Durango con extinción de Fideicomisos: Senadora Valdez