Por: Silvia Ornelas
«Nosotros queremos trabajar aquí, que sea cualquier ciudad de México, que nos den oportunidad»; expresó Mustafá, un migrante de África.
Con la llegada de mil migrantes, entre africanos e haitianos, Durango atraviesa por una situación difícil para mantener en completo orden a la ciudadanía.
Mustafá mencionó que han acudido esta mañana a limpiar las banquetas que se encuentran afuera del Instituto Nacional de Migración (INM), para que la ciudadanía no piense que todos son iguales; enfatizó que consideraron que el lugar se encontraba muy sucio y no quieren ocasionar problemas en la entidad.
Puntualizó que son buenos, provienen de Senegal, y llegaron hace tres días, manteniéndose a la espera de que se les entregue su visa humanitaria para decidir si se quedan o se trasladan a otro lado, con el objetivo de buscar empleo y generar sustento para sobrevivir: «Ellos nos dan una oportunidad para trabajar, tenemos que esperarlo con calma», añadió.
Destacó que ellos esperan con respeto. No les gustaría verse involucrados en temas polémicos. Acuden diariamente al INM para obtener información acerca de su proceso de trámite de visa humanitaria.
Los migrantes se encuentran en una situación difícil por la temporada invernal y sin recurso para sobrevivir. Han comentado que tienen muchas ganas de trabajar, incluso, comparten lo poco que tienen para vivir día a día.
La alimentación de los connacionales ha variado; es importante considerar que cualquier apoyo que la ciudadanía quiera brindar es bien recibido.