Durante el enfrentamiento de la Selección Mexicana de futbol contra Trinidad y Tobago el jugar Hirving Lozano quedó noqueado en el partido a raíz de un fuerte golpe en la cabeza con la rodilla del portero trinitario

Esto luego de un empujón que el árbitro ni siquiera marcó como penal, razón por la que tuvo que salir de cambio en el primer tiempo del partido cuando el juego todavía estaba empatado.

El Chucky fue empujado por la espalda por un zaguero trinitario y al caer su cabeza golpeó con la rodilla y a pesar de lo impactante de la jugada el silbante, Ricardo Montero de Costa Rica no marcó ni la pena máxima, ni tampoco fue al VAR a revisarlo.

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La atención médica de Lozano duró varios minutos y tuvo que salir inmovilizado en una camilla, por lo que de inmediato fue llevado en una camilla a los vestidores para ser evaluado.

Por las reclamaciones el silbante amonestó a Edson Álvarez, y mientras Lozano iba en el carrito de los médicos, la afición coreó su nombre para tratar de animarlo.

A final, antes de salir de la cancha, el delantero mexicano por fin dio muestras de movimiento luego de varios minutos KO y se tomó el ojo lastimado y se le notaba consiente.

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