Una fuerte tormenta azotó la ciudad de Maricá, en Brasil, el pasado lunes, dejando como saldo una trágica pérdida de vida cuando un imponente árbol de Navidad flotante, de 56 metros de altura, se desplomó durante su instalación en la laguna de Araçatiba, cobrando la vida de un joven trabajador de 21 años.
Vinícius dos Santos Abreu fue una de las tres personas que se encontraban trabajando en la estructura cuando esta colapsó.
A pesar de los intentos de sus compañeros por salvarse saltando al agua, Vinícius no pudo sobrevivir y falleció camino al hospital.
Los otros dos trabajadores resultaron heridos pero se encuentran fuera de peligro
Testigos relataron cómo algunos empleados saltaron al agua para intentar salvarse, mientras la gigantesca estructura metálica se desplomaba con gran estruendo, según pudo constatarse en videos compartidos en redes sociales.
Una alerta meteorológica había sido lanzada para esa región
Las autoridades locales informaron que una alerta meteorológica había sido emitida previamente, advirtiendo sobre las fuertes lluvias y vientos en esa región del planeta, que celebra la Navidad en pleno verano.
“En ese momento, la tormenta, con intensos vientos y lluvias torrenciales, derribó la estructura en cuestión de segundos”, indicaron las autoridades en un informe oficial.
Suspenden celebraciones navideñas de la comunidad Sin embargo, el equipo de trabajo no pudo evacuar la zona a tiempo.
El alcalde de Maricá, Fabiano Horta, decretó dos días de luto oficial y suspendió las celebraciones navideñas como muestra de respeto por la víctima.
“No encenderemos las luces navideñas esta temporada como señal de respeto hacia las víctimas”, señaló el político.