Cuando pensabas que no te estaba viendo… Te vi colgar mi primera pintura en el refrigerador, y quise pintar otra.

Te vi alimentar un gato sin hogar, y pensé que era bueno ser amable
con los animales.

Te vi prepararme mi pastel favorito, y supe que las cosas pequeñas
eran cosas especiales.

Te escuché decir una plegaria, y creí que había un Dios con quién
yo siempre podría hablar.

Te sentí darme un beso de buenas noches, y me sentí amado.

Vi lágrimas salir de tus ojos, y aprendí que algunas veces las cosas
duelen y llorar está bien.

Vi que te importaba y quise ser todo lo que podría ser.

Miré… y quise decir gracias por todas esas cosas que yo vi cuando
tu pensabas que no estaba mirando.