En el mundo de los juguetes sexuales existen mil diseños y aparatos para el placer, aunque en ocasiones, por pena, no se acude a su compra y se sigue pensando que solo existe un estilo de vibrador, un tipo de dildo, de esposas, pero hay sin fin de tipos para todos los gustos.

A la hora de comprar unas esposas debemos tener en cuenta qué es lo que queremos introducir con ellas. Ya sean fantasías y recreaciones con personajes, nuevas posturas, o un enfoque al BDSM.

Sin duda, las más conocidos de las estopas sexuales son las de “peluchito”, ya que son las más fáciles de conseguir y son muy cómodas, pero te mencionamos muchos más tipos.

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Con cadena larga. Aproximadamente tienen una longitud total de 66 cm. Asimismo, poseen un aspecto policial, pero con una cadena más larga. Incluye dos llaves y un seguro de liberación rápida.

Con gran resistencia. Son de seda pura y cuero de ante. El cierre consta de unos lazos, también de seda. El cierre en lazada ayuda a un mejor ajuste y, lo más importante, será más difícil que se rompan.

Esposas mullidas. De cuero sintético o peluchito. Incluyen, además, una pequeña cadena que puede engancharse con los mosquetones que trae cada una.

Esposas para pies y manos. Si tu elección es el mundo del BDSM más que una fantasía estas son las indicadas. Son unas esposas perfectas para inmovilizar a cualquier persona en cualquier colchón. Su cierre permite abrirlas con facilidad y jugar con la presión que hacen. Igualmente, puedes usarlas por separado sin las correas.