Sin duda cualquier persona que practique algún deporte correrá un riesgo latente, sea cual sea. En la Liga Mx se han suscitado accidentes de todo tipo, desde pequeños golpes hasta fracturas. Estas son las peores lesiones en el futbol mexicano de los últimos años, en algunos casos terminaron con carreras futbolísticas prometedoras.

Edgar Andrade

Cómo olvidar una de las peores fracturas en el balompié mexicano, quien militaba para el Cruz Azul en el Clausura 2007. En una jugada donde trató de robar el balón a Hugo Drogett, entonces jugador de los Tecos, se le trabó la pierna.

Terrible lesión 🚨🚨

El joven Edgar Andrade sufrió una grave lesión de tobillo en el juego vs Tecos, podría ser bastante grave.

Fuerza Andrade. pic.twitter.com/ZaIuIS6w0Q

— Internet Explorer (@InternetExplo69) December 26, 2019

Andrade presentó una fractura de tobillo. Sin embargo, tras ser intervenido quirúrgicamente y posteriormente cumplir con una etapa de rehabilitación, pudo continuar con su carrera profesional.

Yasser Corona

En el 2017, en el un duelo de la Copa MX entre Tijuana y Correcaminos, Yasser Corona, sufrió un fuerte impacto en la cabeza. El cual lo dejó conmocionado y le llevó a sufrir convulsiones. Literalmente se mantuvo con vida de forma milagrosa, pues sufrió una severa lesión en las cervicales. Misma que le llevó a tener que dejar su carrera profesional.

Fotografía: Twitter

Óscar Ustari

Tal vez el más reciente y que todos recordamos es la lesión del portero de los Tuzos del Pachuca. Protagonizó una de las escenas más escalofriantes dentro de una cancha del futbol mexicano. En la Jornada 8 del Apertura 2017, el cancerbero sufrió una aparatosa lesión. Una luxación de rótula y rotura del tendón rotuliano en su rodilla izquierda.

Te puede interesar: Futbolistas piden que el próximo DT del Tri sea mexicano

Efraín Juárez

el defensor surgido en los Pumas de la UNAM sufrió una terrible lesión en un partido ante Correcaminos. El exseleccionado nacional tuvo una luxación de codo y de manera inmediata fue atendido por el cuerpo médico del cuadro azulcrema. Sin duda, una de las peores lesiones en el futbol mexicano hasta ese momento.