En una mesa redonda sobre el combate al tráfico de armas y mejores prácticas entre México y Estados Unidos, el embajador de Estados Unidos en México, Ken Salazar, reconoció abiertamente que el 70% de las armas que ingresan de manera ilegal a México proceden o son manufacturadas en Estados Unidos.
El representante del gobierno de Joe Biden enfatizó la necesidad de abordar este problema de manera conjunta, proponiendo la inversión en la frontera y la judicialización de los casos como pilares fundamentales para frenar el flujo de armamento ilegal.
Durante la inauguración de la mesa redonda, Salazar subrayó la magnitud del desafío, destacando que el tráfico de armas está directamente relacionado con el 70% de los homicidios dolosos en México. La disposición de ambos países para abordar conjuntamente este problema se resaltó, pero también se hizo hincapié en la necesidad de acciones más concretas para enfrentar el problema.
‘Reconocemos nosotros que el 70% de las armas que llegan a México, que causan violencia aquí en México llegan de los Estados Unidos, o son manufacturadas en los Estados Unidos’, afirmó Salazar. Este reconocimiento marca un paso significativo en la relación bilateral, ya que el tráfico de armas se ha convertido por primera vez en dos siglos en un punto central de la agenda entre México y Estados Unidos.
Ken Salazar propone medidas para combatir el tráfico de armas
El embajador señaló que, además de la voluntad política para abordar el problema, se necesitan medidas más concretas. En este sentido, propuso la inversión en la frontera como una herramienta clave para fortalecer la seguridad y detectar armas antes de que crucen hacia México.
También hizo hincapié en la importancia de la judicialización de los casos relacionados con el tráfico de armas, destacando la necesidad de investigar y procesar a aquellos que estén involucrados en esta actividad ilícita.
‘Vamos a hacer lo máximo para que no lleguen las armas acá a México. Eso requiere inversión también para tener una frontera más segura con equipaje moderno, con la tecnología, que podamos descubrir estas armas antes de que crucen la frontera’, expresó Salazar. Además, insistió en que la judicialización de los casos debe llevarse a cabo en ambos lados de la frontera, trabajando de manera conjunta para investigar y procesar a los responsables del tráfico de armas.
El embajador afirmó que, aunque el tráfico de armas es un problema compartido, México y Estados Unidos deben abordarlo como socios y no como una responsabilidad individual. Esta perspectiva refleja la necesidad de colaboración y entendimiento mutuo para hacer frente a un problema que afecta directamente la seguridad y la paz en ambos países.
Gobierno de AMLO incrementa el decomiso de armas
Por su parte, Cristina Planter, directora general de Asuntos Políticos de la Secretaría de Relaciones Exteriores de México, destacó que durante la administración de Andrés Manuel López Obrador se ha registrado un aumento del 65% en el decomiso de armas en comparación con la administración anterior. Sin embargo, señaló que la cooperación bilateral sigue siendo crucial para abordar eficazmente este desafío.
El combate al tráfico de armas se presenta como un tema urgente en la relación bilateral entre México y Estados Unidos, y la mesa redonda busca evaluar los avances y retos en la implementación de estrategias conjuntas.
La voluntad de reconocer abiertamente la procedencia de las armas y la necesidad de medidas concretas refleja un enfoque más pragmático para abordar este problema de seguridad compartido.
También te puede interesar: