El metrobús
Por: Emmanuel Salazar
Todo tipo de razonamientos y opiniones ha generado la determinación del presidente Andrés Manuel López Obrador de dejar sin recursos a la región laguna de Durango para el metrobús, algunos de los cuales han sido sensatos.
Por ejemplo, el diputado de Morena, originario de aquella región, Ramón Román Vázquez, fue puntual al señalar que si se consulta a la población sobre qué se debe priorizar, si el agua o el metrobús, aseguró que indudablemente la gente apoyará el proyecto del vital líquido.
Y es muy posible que así sea, puesto que la viabilidad de la región laguna está en duda debido a que el abasto del vital líquido no está garantizado, a menos de que, nuevamente el bosque de Durango subsidie como lo hace hasta ahora a toda esa región que, paradójicamente ante la generosidad duranguense pretende crear un estado.
El proyecto de llevar agua de la presa Francisco Zarco a los municipios de Coahuila, o sea agua de Durango al vecino estado y sobre todo a los empresarios de Torreón, tan activos en impulsar la separación, es sólo eso, un proyecto que carece, hasta ahora, de estudios de viabilidad como los tenía el metrobús, que finalmente ha echado atrás el presidente López Obrador.
Pareciera pues que el griterío del domingo tenía ya el plan trazado de cancelar la inversión de 800 millones de pesos, monto que reporta el periódico Reforma se aplicarían en el año, de los cuales Durango tendría que aportar 300 millones.
El exdirigente de Morena, Carlos Medina Alemán, quien dijo haber estado presente en la gira del presidente López Obrador, asegura que fueron los simpatizantes de la alcaldesa electa Marina Vitela, quienes lanzaron las agresiones verbales contra el gobernador y por supuesto contra el famoso metrobús.
El portal durangos21 realizó una transmisión en vivo de la visita del presidente López Obrador, y ahí se ubicó a un grupo reducido de personas que eran las que inducían al resto a gritar contra la famosa obra del metrobús.
Sin embargo, en la transmisión independiente no se logra apreciar, porque la reportera estaba en el otro extremo, que los inconformes portaban playeras de servidores de la nación que según el periodico Reforma fueron quienes alentaron la gritería contra el Gobernador.
Al final, la inversión que captaría Durango por ese proyecto se alejó sin siquiera poder tener la certidumbre de que ese recurso se pueda canjear para respaldar alguna obra para garantizar agua a la zona.