LA PALABRA DEL GIOCONDO… Ni grillos ni chapulines
Por: Alejandro Flores de la Parra
En el Cabildo capitalino, han sido varias las voces que han buscado protagonismo en esta administración, desde criticar obras que no son ejecutadas por el Ayuntamiento, hasta buscar señalar el desempeño de algunos directores. Al final, todo ha quedado en una búsqueda de polemizar donde no hay ni qué criticar.
Sin embargo, este pasado viernes, la octava regidora, Fernanda Brena Montesinos, fiel a su estilo, solicitó hacer un posicionamiento para señalar lo que ella juraba, eran dos temas que han manchado la administración. El primero, una acusación que hizo un excandidato del extinto Partido Encuentro Solidario; la segunda, una nota periodística que dio por cierta.
Como ciudadanos, podríamos esperar que nuestros representantes sean gente informada y preparada y, aunque nadie sabe todo, al menos esperaríamos que investigaran a fondo los temas, sobre todo cuando cuentan con todas las facultades de exigir a nuestras autoridades municipales, se entregue toda la información respecto de cualquier tema que les competa. Pues no, en este caso, no fue así y, dicho por la misma regidora, su fuente, en ambos casos, fue algo que vio en las redes sociales. No solo resulta desalentador que nuestros representantes basen su actuar en el pleno, por lo que bien podría ser tomado como «fake news», menos cuando se supone que pertenecen al partido de quien ya exhibe la mal información a nivel nacional todos los miércoles, sino que resulta ridículo que, a estas alturas, no verifiquen primero la información.
En sus acusaciones, la regidora mencionó la desaparición de 400 mil luminarias que en la administración anterior (en la que por cierto colaboró) fueron sustituidas por lámparas LED, esas que nos querían encasquetar en más de mil 200 millones de pesos y que la decisión del alcalde, Jorge Salum, nos permitió renegociar como municipio y nos salvó de pagar un sobrecosto de unos 800 millones. Para darnos una idea, Nueva York tiene unas 250 mil luminarias, por lo que la cifra mencionada resulta totalmente desorbitada. Además hizo mención de que la Síndico Municipal se encontraba amparada respecto a ese tema y solicitó se separara del cargo.
Al final, la propia Luz María Garibay, titular de la Sindicatura, le corrigió la plana y le demostró que, el destino de las luminarias que se suplieron (unas 35 mil), fueron vendidas como chatarra por decisión de la Comisión y no como producto de un decreto unilateral al que, por supuesto, ni siquiera le correspondería. Además, aclaró que el amparo al que la regidora hizo alusión, es para solicitar a la autoridad judicial que se investigue el caso, no para evitar una posible detención, como ella insinúa.
Esta penosa intervención, nos deja una enseñanza, y es que como sociedad no podemos seguir permitiendo que gente que no está preparada y no busca estar a la altura de nuestra representación, siga ocupando los espacios para hacer grilla por cualquier tema, pues estos tiempos ya no están para grillos ni chapulines.
Twitter: @AlejandroFdelaP